El Presidente de la República de Serbia, Aleksandar Vucic, asistió hoy a la conmemoración del Día del Recuerdo el 17 de marzo de 2004, el Pogromo en Kosovo y Metohija. Dijo que hace exactamente 17 años, se cometió un pogromo en Kosovo y Metohija, y que el pogromo supera a todos los demás crímenes.
“Puede haber momentos en los que no tengamos el poder de prevenir la injusticia, pero nunca debe existir el momento en que no seamos capaces de protestar, estas palabras de Elijah Wiesel, ex prisionero de un campo de concentración, premio Nobel, nos obligan a no guardar silencio ante el crimen, sea quien fuera el que lo haya cometido ni porque lo haya hecho”, dijo el presidente Vucic y agregó que recordamos y aprendimos de cada lección en la que fuimos los perdedores, cada una en la que guardamos silencio sobre nuestras propias víctimas, cada una en la que estábamos dispuestos a olvidar.
“Serbia hoy ya no es débil, ni es un país de perdedores, no amenaza, pero tampoco olvida, está lista para negociar, pero no para la humillación. Serbia, al igual que los demás, tiene derecho a cuidar de su gente, de su seguridad y su bienestar. El derecho a la vida es un derecho humano básico y nosotros lo defenderemos siempre ", dijo el Presidente Vucic.
El Presidente Vucic dijo que el pogromo supera a todos los demás crímenes, porque no es solo un hecho, sino una intención, una política, una premeditación para que una región, un país, sea purgado por la fuerza de miembros de otras naciones y religiones.
"No tenemos derecho a quedarnos callados", dijo el presidente de Serbia, enfatizando que tenemos la obligación de ser ganadores sin sangre y sin guerra, los mejores en economía, salud, deportes, educación y todo lo demás que haga el desarrollo y el progreso.
Deseamos lo mismo a los demás, que se dediquen a sí mismos y tengan éxito, porque somos conscientes de que el crimen es la herramienta para los perdedores, y los ganadores no necesitan eso, ellos recuerdan, perdonan y siguen adelante, mientras que los perdedores giran en el mismo círculo vicioso. Nosotros los serbios ya no queremos ser eso, queremos un futuro,  en el que recordaremos, pero del que no retornaremos. Sabemos lo que pasó y lo llamamos por su verdadero nombre ", concluyó el presidente Vucic.
Foto: Dimitrije Gol